Una residencia de futuros pilotos y cuatro nuevos hangares: el ambicioso plan de crecimiento del aeródromo de Mutxamel

Con un clima envidiable y con un promedio de casi 350 días de sol al año, Alicante es un destino predilecto no solo para los turistas, sino para muchas actividades económicas. Es el caso del aeródromo de Mutxamel, una ubicación única en España y un enclave que lleva desde 1981 operativo en la provincia. A tan solo 15 minutos de Benidorm y 10 de Alicante, el espacio aeronáutico cuenta con 200.000 metros cuadrados y una escuela de pilotos puntera: European Flyers.

El aeródromo alberga además varias empresas, como el operador de helicópteros Avincis, Pegasus o Roeder Ibérica, entre otras. Con 10.000 operaciones anuales, ofrece zona de aduanas, repostaje y una plataforma de 35.000 metros cuadrados.

La empresa gestora del aeródromo de Mutxamel, que dirige Luis Miñano, también director general de European Flyers, ha diseñado un importante plan de expansión para los próximos años que culminará con más hangares y con un área social que contará con una residencia de estudiantes, así como con áreas de entrenamiento para profesionales de los cuerpos de seguridad.

El aeródromo de Mutxamel atesora una zona de suelo terciario de 25.000 m2. «No solo tenemos la categoría urbanística de nuestra infraestructura aeronáutica totalmente definida y autorizada, también una zona de 25.000 metros cuadrados calificado como suelo terciario», explica Miñano a TodoAlicante.

La idea, a pesar de no concretarse los plazos, es poder expandir en los próximos años el aeródromo, con el horizonte de 2030 bien marcado. Con un hangar en construcción y tres más proyectados, el espacio aeronáutico contará con una zona más social «con áreas de cara al público, que no sean restringidas», asegura el gerente del aeródromo.

El empresario y piloto alicantino detalla que el proyecto incluirá una residencia de estudiantes, dirigida a los futuros pilotos que se forman en la escuela European Flyers. Esta zona tendrá a su vez más áreas, como un campo de fútbol e instalaciones deportivas, así como un restaurante.

«La idea es hacer una residencia de estudiantes y zonas sociales abiertas al público», explica Miñano, que detalla que también prevén desarrollar una zona verde. En esta área social habrá espacio para un simulador de vuelo, así como simuladores y zonas específicas para el entrenamiento conjunto con cuerpos de seguridad y tareas de rescate.

El dirigente del aeródromo evita dar plazos, aunque se muestra satisfecho con el trabajo que llevan realizando para seguir avanzando en el aeródromo. «Esto empezó en el 81, pero la categoría que tiene como aeródromo es única en España», afirma Miñano, quien asegura que «vamos haciendo cosas conforme tengamos el plan de negocio justificado, no podemos desarrollar todo el plan hasta que tengamos la viabilidad definida, pero está funcionando«.

Miñano subraya las características únicas de este enclave aeronáutico cercano a la playa y a localidades como Alicante o Benidorm. «Estás dentro de una zona urbana, tienes un campo de golf cercano...», expresa el propietario sobre las particularidades de este enclave.

Además, destacan los servicios que oferta. «Tenemos todo coordinado para que la aviación ligera que lo requiera no tenga que pasar por el aeropuerto», explica Miñano, quien enumera algunos de los servicios como las aduanas, controles policiales de seguridad o zona de repostaje. «Por ejemplo, hace escasos días hemos sido base de un rally que iba de Toulouse a Tánger», expone.

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